Traducir sin entender...

Tom?s Segovia

Traducir y entender



Sabrosa e inteligente charla del poeta hispano-mexicano, nacido en Valencia en 1927, la cual se desarroll? sobre la base de dos desaf?os: la imposibilidad de traducir debido a la inevitable falta de t?rminos equivalentes en la lengua a la cual se traduce y la posibilidad, nada com?n, de poder traducir sin entender. Tom?s comenz?, como siempre, con una comparaci?n entre los problemas de la f?sica y los de la traducci?n, y luego fue, poco a poco, matizando sobre el arduo oficio de traducir.

Traducir implica, ante todo, conocer perfectamente las dos lenguas: la del traductor y la que se traduce. El diccionario no es suficiente, aunque saber hacer uso de ?l sea obligatoriamente necesario, lo que verdaderamente importa para un traductor es la experiencia que ?ste tenga de su propia lengua y de la lengua de la cual traduce. Uno no puede discutir con el diccionario. Los diccionarios no hablan. Lo importante es la lengua viva: el sentido, los hechos, el conocimiento directo de la otra lengua. Las traducciones no se hacen solamente ? coup de dictionnaire, sino sobre todo gracias al conocimiento de dos o m?s lenguas (plano de la expresi?n (gram?tica) y plano del contenido (el contexto mismo de las lenguas) que tiene quien traduce. Porque traducir implica, casi siempre, ir m?s all? del simple plano de la expresi?n, de la escritura, pero sin olvidar que ?ste, la forma en que el contenido se presenta ante el traductor, es el suelo del que debe partir quien emprende una traducci?n.

Traducir es, m?s que una profesi?n, un oficio artesanal. El traductor es pues un artesano: ?oficial mec?nico que gana de comer con el oficio de sus manos? (Diccionario de autoridades). Y sobre todo de su inteligencia. El traductor es, pues, un artesano-intelectual que realiza un minucioso trabajo de filigrana. Artesan?a intelectual. Porque traducir implica ahondar en detalles de palabras que no siempre est?n bien explicadas por su contexto o que no aportan los datos necesarios para saber si son, por ejemplo, masculinas o femeninas, singulares o plurales. Ante el asombro de muchos, Tom?s recurri? a varios ejemplos entresacados de la lengua inglesa, porque su formaci?n, como se sabe, fue m?s bien en franc?s, en los Liceos de Par?s y de Casa Blanca. Entre burlas y veras, explic? a la audiencia que la imposibilidad de la traducci?n no debe impedirnos emprender lo imposible. Pero que, a veces, oh paradoja, se llega al extremo de tener que traducir sin entender, como en el caso de la poes?a, en la que, por ejemplo, en el caso de Arthur Rimbaud, hay versos en los que, aun cuando se conoce bien el sentido de cada una de las palabras, ?stos no permiten ser descifrados totalmente:

Elle est retrouv?e
Quoi? L??ternit?.
C?est la mer all?e
Avec le soleil

Entonces, hay que traducir sin entender y dejar a otros el trabajo de decodificaci?n.

Finalmente, Tom?s concluy? su charla respondiendo algunas preguntas que los asistentes le hicieron, entre los cuales destaca la presencia del Rector de ?sta Universidad, Gerardo Valenzuela S.J. Tom?s disert? amplia y sabrosamente sobre el conocimiento, sobre la retribuci?n emocional que produce el haber hecho una buena traducci?n y sobre la educaci?n infantil.

0 cosillas que tú dijiste:

Publicar un comentario

Last FM

Bienvenidos

Bienvenidos sean todos a descubrir un poco de lo mucho que pasa por mi mente en mis momentos de ocio

My readers